Juan Carlos Pérez Navas, senador del PSOE de Almería
Después de siete años de injusticias los españoles pueden tener unos Presupuestos Generales del Estado sociales que intentan no dejar a nadie atrás, y que plantean medidas como la subida del salario mínimo, la lucha contra la pobreza infantil -que tanto ha crecido estos años de desigualdad y recortes en España-, que aumenten las prestaciones para las familias más necesitadas, con incrementos en Dependencia, en becas, unos presupuestos que con independencia de nuestros ingresos, seamos iguales ante la enfermedad , la educación, el empleo o las políticas sociales, lo que lo configuran como un presupuesto por justicia social.
Estos presupuestos que tanto duele a las derechas de este país marcan un punto claro de inflexión en la política económica y presupuestaria tal y como venimos sufriendo, pasando a un modelo compatible de consolidación fiscal con un fuerte incremento del gasto público, distribuyendo la riqueza y sentando las bases de un crecimiento más inclusivo.
Es hora, y este Gobierno así lo entiende y está decidido a ello, que tras los recortes de 7 años de los gobiernos del PP que los ciudadanos empiecen a ver reflejado el crecimiento económico en su día a día, y que todos esos esfuerzos y sacrificios sean ahora compensados, fortaleciendo las clases medias y trabajadoras con salarios dignos y pensiones más dignas. Hay partidas decididas para luchar contra la violencia machista, para avanzar en la universalización de la educación de o a 3 años, se ha aumentado un 41% los programas de ayuda para acceder a una vivienda digna, se ha producido un incremento notable en infraestructuras de un 40% de las que, por ejemplo, en Andalucía y en Almería, por fin, nos veremos beneficiados y resarcidos tras estos años de desamparo y olvido por parte del Gobierno de Rajoy.
Medidas como la reducción del IVA en los productos de higiene femenina, el aumento de las ayudas y de las becas al estudio fuertemente sacrificadas en los 7 años del PP, los 670 millones de inversión para el Plan de Choque de Empleo Joven, la recuperación del subsidio para mayores de 52 años, el incremento del 59,3% del gasto para ayudas a las personas dependientes, son de vital importancia. Hay otras muchas medidas cuyo objetivo es la regeneración, la transparencia y un modelo económico más justo y progresivo. Un modelo que prohíbe las amnistías fiscales, que sube el IRPF a las rentas superiores a 130.000 euros, que exige mayor tributación a las grandes empresas por el impuesto de sociedades y, a la vez, se compatibiliza con una rebaja de impuestos, por ejemplo, a las pymes que facturen menos de 1 millón de euros.
En definitiva, unos Presupuestos Generales pensados para que España avance y sea una sociedad más igualitaria, más justa, más moderna y más avanzada pese a una derecha radicalizada que no quiere que sus ciudadanos progresen.