Manolo García recuerda las constantes peticiones de los socialistas y rechaza que ahora se presente como un “favor” el hecho de que lo haga Diputación, cuando la actuación se incluye dentro del acuerdo de cesión de varias carreteras provinciales que va a tener que reformar el municipio
El Partido Socialista de Roquetas de Mar ha denunciado el uso electoral que está haciendo el alcalde, Gabriel Amat, de proyectos como el Puente de la Rambla del Cañuelo, que se va a construir a la altura del cementerio, una actuación que hoy han tratado de “vender electoralmente” tanto el alcalde como el presidente de la Diputación, Javier Aureliano García, “tras años en los que han rechazado hacer ese proyecto”.
El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Roquetas y candidato a la Alcaldía, Manolo García, ha recordado que “desde el Partido Socialista de Roquetas de Mar llevamos más de una década reclamando al PP la construcción de ese puente, imprescindible para nuestros agricultores y para facilitar las comunicaciones con el municipio vecino de Vícar y, sin embargo, durante todo este tiempo Amat ha venido rechazando rotundamente la actuación y cargando la responsabilidad a la Junta de Andalucía”.
Por ello, Manolo García ha calificado de “desfachatez” que ahora se quiera usar electoralmente un proyecto que nunca se ha querido ejecutar y al que no se ha dado la importancia que merece. El portavoz socialista ha recordado que el PP siempre ha dicho que ese proyecto era responsabilidad de la Junta de Andalucía “a pesar de ser una carretera provincial dependiente de Diputación y de que la parte de la rambla afectada está en un tramo urbano, cuya responsabilidad es exclusivamente municipal, como han dejado claro recientes sentencias”.
García ha recriminado que ahora trate el PP de hacer pasar por un “favor” el proyecto del puente que ejecutará la Diputación, recordando que el mismo se incluye en el acuerdo para la cesión de la Diputación de varias carreteras provinciales que ahora asume el municipio y que tendrá que reformar el Ayuntamiento de Roquetas de Mar por un valor de más de 8 millones de euros. Por tanto, se trata de un acuerdo que en su balance total “es lesivo para los intereses de los ciudadanos de Roquetas que, una vez más, pagan las convidadas del alcalde hacia otras administraciones, en lugar de hacer lo que haría cualquier alcalde, que es exigir en los despachos esas inversiones y ahorrar al máximo los costes a sus vecinos, para así poder bajar unos impuestos que son los más altos de Andalucía”.