El concejal socialista es la primera persona con movilidad reducida en formar parte de la Corporación Municipal de El Ejido, y ha tomado posesión de su cargo en un salón de plenos en el que no pudo estar junto a su Grupo Municipal, al no existir un rebaje de acceso, y del que en 5 horas no salió ni para ir al baño, ya que esa planta del Consistorio carece de aseos adaptados
Francisco Ripoll tomó posesión ayer de su acta como concejal del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de El Ejido, con las mismas ganas e ilusión que los otros cuatro ediles del PSOE ejidense que también prometieron su cargo durante el pleno ordinario celebrado ayer. Un pleno con más de una veintena de puntos en el orden del día, y con temas tan densos a abordar como la aprobación de los Presupuestos de 2019, por lo que se dilató durante cinco horas.
Hasta prácticamente las cuatro de la tarde no se inició el turno de ruegos y preguntas, en un pleno que arrancó a las once de la mañana. Francisco Ripoll, primer concejal además con movilidad reducida en formar parte de esta Corporación Municipal, aguantó estoicamente hasta este punto para hacer reflexionar al equipo de gobierno del PP, y especialmente al alcalde ejidense, sobre si está haciendo o no todo lo posible por alcanzar esa accesibilidad en el Ayuntamiento de El Ejido, que además está garantizada por la Ley 4/2017, de 25 de septiembre, de los Derechos y la Atención a las Personas con Discapacidad en Andalucía
De este modo, el concejal socialista planteó que esta Ley “se está incumpliendo” en el Ayuntamiento, y a su juicio lo más lamentable es que es precisamente la Administración local la primera que “debe dar ejemplo”. Ripoll planteó además cuestiones tan contradictorias como el hecho de que la Policía Local pueda imponer sanciones a locales o establecimientos por incumplir este tipo de normativas, “y el primero que las incumple es el propio Ayuntamiento”.
En el caso concreto del primer pleno vivido ayer por parte del edil, y a pesar de la emoción que reconoce que fue para él “prometer el cargo de concejal”, este momento se empañó por dos cuestiones fundamentales. La primera de ellas tuvo que ver con el hecho de que “no pude estar junto a mis compañeros, en la misma fila del Grupo Municipal Socialista, porque esa zona del pleno no cuenta con un rebaje de acceso”, ha recordado.
La segunda fue más grave aún, teniendo en cuenta que la sesión duró cinco horas. “Llevaba un rato aguantándome para ir al baño y lo dije también, porque en esa planta del Ayuntamiento no hay baños adaptados, tendría que salir del Ayuntamiento por la calle Cervantes, entrar por la Plaza Mayor, y luego volver a hacer el mismo recorrido pero a la inversa”, ha relatado.
Sin embargo, mientras el alcalde recalcó las obras que acaba de iniciar con fondos europeos para realizar las adaptaciones necesarias para mejorar la accesibilidad en el Centro Asociativo o en el IMD, “lo primero siempre debe ser el Ayuntamiento porque es la casa de todo el pueblo”, ha dejado claro el edil socialista.
El popular también llegó a decir al concejal del PSOE que ya conocía las carencias del Ayuntamiento en esta materia, puesto que lleva varios años acudiendo a ese mismo Pleno como miembro del Consejo Municipal de la Discapacidad. Algo que para Ripoll resulta increíble porque “además de que en cada Consejo he denunciado que esta Ley se está incumpliendo en el Ayuntamiento, estas adaptaciones tendrían que estar ya más que hechas”.