Indalecio Gutiérrez Salinas, diputado nacional por el PSOE de Almería
El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ha ofrecido un nuevo Pacto de La Moncloa; un acuerdo que una a los españoles y españolas para luchar contra la epidemia del coronavirus y sus consecuencias económicas y sociales.
La mayoría de la sociedad española está demostrando que está a la altura que exige una crisis tan grave y sin precedentes en el mundo. Los españoles y españolas están manifestando una gran resistencia y fortaleza, al respetar las duras medidas de confinamiento. De otro lado, los profesionales sanitarios están demostrando que son unos verdaderos héroes; unos auténticos héroes y heroínas de carne y hueso.
Las trabajadoras y los trabajadores públicos, los de los sectores esenciales (supermercados, agricultura, ganadería y pesca, industrias esenciales, transportistas, etc.) están realizando un extraordinario esfuerzo para que este país siga funcionando. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, las Fuerzas Armadas; efectivos de protección civil, policía local, las comunidades autónomas, diputaciones provinciales, ayuntamientos, alcaldes, alcaldesas…, todos y todas se están empleando a fondo para frenar y vencer al Covid-19. En definitiva, la sociedad española está siendo ejemplar a la hora de luchar contra esta pandemia y para vencerla.
Si para todo ello estamos demostrando una gran responsabilidad y unión, ahora tenemos -de la misma manera- la oportunidad histórica de enfrentarnos unidos a la reconstrucción de la actividad económica y social que tendremos que afrontar.
En este estado de las cosas, necesitamos un gran pacto de todos: partidos políticos, agentes económicos y sociales (empresarios, sindicatos, tercer sector…) y comunidades autónomas. Unos nuevos Pactos de la Moncloa que nos permitan recuperar nuestro país en términos económicos y sociales tras esta crisis sanitaria.
En este momento tan crucial, la oposición política, representada por el PP, debe de mostrar altura de miras. En esta hora histórica tiene la oportunidad de ser útil o sucumbir a la tentación de sacar rentabilidad política de esta crisis sanitaria y no aportar nada a la solución del problema. En esa disyuntiva se encuentra Casado, que en realidad tiene la solución en su mano: si quiere ayudar y sumar ha de salir cuanto antes de esa trinchera ultraderechista en la que está instalado y apoyar al Gobierno para fortalecer social y económicamente a España.