Antonio Martínez considera que el Gobierno de España ha emprendido una revolución verde “valiente y ambiciosa” que hará una sociedad “más justa”
El senador por el PSOE de Almería, Antonio Martínez Rodríguez, ha mostrado su convencimiento de que la futura Ley de Residuos será “clave” para Almería ya que “permitirá avanzar hacia la sostenibilidad y hacia un modelo de economía circular en nuestra provincia”. “El turismo y el sector pesquero dispondrán de un litoral libre de residuos plásticos y nuestros agricultores de los sistemas de gestión de residuos y de reutilización de aguas residuales depuradas que tanto demandan”, ha certificado.
Esta ley, cuyo anteproyecto fue aprobado en Consejo de Ministros, se suma a la futura Ley de Cambio Climático y muestran, a juicio del senador socialista, que durante estas primeras semanas de desescalada en la crisis sanitaria actual, el Gobierno de Pedro Sánchez ha apostado de manera decidida por una “reconstrucción verde valiente y ambiciosa que nos permita avanzar en los próximos años hacia una sociedad más justa, más saludable, más sostenible y con más empleo”.
Se trata, ha insistido, de “una prueba más de que en esta época de sufrimiento y de crisis sanitaria, mientras El Gobierno andaluz apuesta, en lo político, por la confrontación y, en lo ambiental, por el “’ecopostureo’ y desregulación, el Gobierno de Pedro Sánchez está centrado únicamente en salvar vidas, empresas, y empleos, así como dejar a las generaciones futuras una sociedad más sana, justa y sostenible”, ha defendido el senador por el PSOE de Almería.
En este sentido, la aprobación del anteproyecto de nueva Ley de Residuos y de la Estrategia ‘España Circular 2030’ tiene, según ha señalado, dos objetivos claros. En primer lugar, la normativa “servirá de palanca para la recuperación económica y también para que, de que una vez por todas, en nuestro país se genere empleo, se produzca y se consuma pensando en el planeta”.
“Pasaríamos del modelo actual de economía lineal, basado en el consumo desproporcionado de recursos y posterior desperdicio a un sistema circular, donde la clave será reducir al máximo el ritmo al que creamos y desechamos productos”, ha traducido y, para ello, ha añadido que el Gobierno progresista se ha planteado objetivos “muy ambiciosos” que pasan por crear 70.000 empleos en el ámbito de la gestión de los residuos y, a la vez, reducir un 30% el consumo de materiales, mejorar un 10% la eficiencia del uso del agua y recortar un 15% la generación de residuos respecto a 2010.
Con el objeto de evitar la contaminación de playas y mares “se recoge la prohibición de la distribución gratuita y venta de plásticos de un solo uso y se establece un impuesto para ellos”, ha remarcado y, en contrapartida, “se establece la necesidad de fomentar alternativas reutilizables y materiales que no sean plásticos”.
Asimismo, ha destacado, que la nueva normativa plantea que para reducir el consumo de envases, se establece que las administraciones públicas y sector de hostelería y restauración deberán adoptar las medidas necesarias para reducir el consumo de agua embotellada y ofrecer la posibilidad de consumo de agua no envasada de manera gratuita.
Las tasas de reciclado y reutilización que recoge la ley y la estrategia son igual de exigentes. Según ha trasladado el senador socialista, en 2025, “el 55% de los residuos municipales generados deberán reciclarse o reutilizarse” y en 2030, será el 60% alcanzando el 65% en 2035. En este sentido, ha informado, “se adoptan medidas para combatir la interesada obsolescencia programa de determinados productos” y también, medidas para “evitar el desperdicio alimentario en cadenas de supermercados y restaurantes”.