Moreno Bonilla se oculta en el autobombo mientras Andalucía reclama gestión, diálogo, realidades y menos charlatanería
Coincidiendo con el Debate del Estado de la Comunidad se conocieron los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) que dejaban para Andalucía un malísimo dato de pérdida de 41.000 empleos cuando, al contrario, en el resto de país se había creado empleo. Este dato se acompañaba con un informe sobre la fuga de empresas de las comunidades autónomas que refleja, tristemente, que ocupamos el segundo lugar -después de Cataluña- en pérdida y huida de empresas en lo que va de año. Toda esta realidad contrasta con aquella promesa realizada por Moreno Bonilla a la ciudadanía en la que se comprometía a que Andalucía iba a ser la comunidad más atractiva y destino preferente para las empresas.
Esa es la tozuda realidad a la que se le añaden otras como el despido de 8.000 sanitarios, el destrozo de la sanidad pública, la precaria situación de la educación, la falta de apoyo a los ayuntamientos, o la falta de planes de empleo. Así está Andalucía de la mano de PP y Ciudadanos.
Mientras, Moreno Bonilla tira de autobombo para tapar estas vergüenzas y sigue obsesionado por una política fiscal que baja impuestos a los que más tienen para después exigir más fondos al Gobierno de España. Se envuelve en la bandera de papel del diálogo que predica, pero que no practica y con su gestión viene a decepcionar a los miles de ciudadanos, colectivos, empresas, autónomos y sectores productivos que están hartos de esperar. Quieren a un presidente andaluz que facilite medidas para continuar con el avance de Andalucía sin confrontación, sin rencor y sin la búsqueda permanente del sentimiento de ofendido cuando no deja de buscar la discusión con el
Gobierno central. Un Ejecutivo, el de Pedro Sánchez, con el que no puede tener queja en virtud al trato recibido y al apoyo decido a nuestra comunidad que se materializa en los miles de millones de euros en ayudas y en los Presupuestos Generales del Estado (PGE). Andalucía es la comunidad que más recibe de los Presupuestos y con la que ya se ha cumplido, paralelamente, a través de los Fondos Covid y los anticipos de los fondos europeos. Las partidas, está probado, están adjudicadas y aportadas, tan sólo queda saber en qué lo ha invertido el Ejecutivo de Moreno Bonilla.
Los andaluces y andaluzas reclaman gestión y no propaganda, quieren diálogo y no confrontación. Quieren realidades y menos charlatanería.