Para Manolo García, que una puerta con un siglo de historia se esté vendiendo en Wallapop “en buen estado” después de que el Ayuntamiento subvencionara su sustitución, ejemplifica “una vez más” el desprecio del PP de Amat al patrimonio histórico de la ciudad
El portavoz del PSOE de Roquetas de Mar, Manolo García, ha lamentado el destino que ha tenido la antigua puerta de la iglesia de Nuestra Señora del Rosario, que ha aparecido a la venta en un anuncio en Internet en la popular plataforma de segunda mano Wallapop. A su juicio, “lo ocurrido ejemplifica una vez más el absoluto desprecio del alcalde y su partido por el patrimonio histórico de la ciudad”.
El representante socialista ha recordado que la puerta tiene un siglo de historia, siendo financiada en 1922 por Pepa Padilla. “Por ella hemos pasado miles de roqueteros para acceder a la iglesia y pese a que en el anuncio se dice que se encuentra “en buen estado” ha acabado desechada por antigua, como tantas cosas en Roquetas, y a la venta por Internet, primero por 1.800 euros y después rebajada a 1.200 euros”, ha desvelado.
El portavoz socialista se ha interrogado por el papel que ha tenido el equipo de Gobierno del PP en todo el proceso, recordando que el año pasado se subvencionó a la parroquia con 10.000 euros para la sustitución de la puerta y el pintado del interior del templo. “Cabe preguntarse si hay otras necesidades más urgentes que subvencionar la sustitución una puerta que se encuentra en buen estado y con la que posteriormente se hace negocio”, ha indicado. Por otro lado, Manolo García también ha pedido explicaciones por los motivos por los que “un ayuntamiento que tiene un presupuesto de más de 111 millones de euros, no ha movido ni un dedo por salvar esa puerta y darle un mejor uso dado su valor sentimental e histórico para la ciudad”.
“Es un incidente tristemente anecdótico, pero que se suma a la interminable lista de desprecios y agresiones hacia el patrimonio histórico de nuestro municipio que viene cometiendo el alcalde y su partido”, ha lamentado Manolo García, que cita su “acción u omisión” en la pérdida y deterioro de la mayor parte de la historia de la ciudad, como “casi todas las edificaciones antiguas que teníamos”, entre las que ha mencionado de manera especial la Casa de Anita Guerrero “destruida por Gabriel Amat con excusas que nadie se cree, pese a que se adquirió para salvarla”.