El Gobierno de España continúa trabajando sin descanso para hacer frente en nuestro país a las graves consecuencias económicas que está teniendo en la economía mundial la guerra de Ucrania. En un escenario económico adverso del que no se está librando ningún país europeo, el Ejecutivo de Pedro Sánchez está sobresaliendo por su contundencia a la hora de tomar medidas que protejan a la ciudadanía, y especialmente a las familias más vulnerables, del impacto económico del conflicto.
Entre esas iniciativas, destaca la nueva rebaja del IVA del precio de la luz, que hace un año ya se bajó del 21% al 10% y que ahora se recortará de nuevo, hasta el 5%. Esta medida se suma, además, al tope al precio del gas que el presidente Pedro Sánchez peleó en Bruselas en mayo en una negociación histórica y que está permitiendo que el precio de la electricidad en España se mantenga por debajo de los países de nuestro entorno. Asimismo, se les está pidiendo un esfuerzo a las empresas eléctricas para que colaboren con su país cuando más falta hace.
Desde el Gobierno de España, el PSOE también está haciendo un enorme esfuerzo por ayudar a los ciudadanos y ciudadanas a afrontar otro gasto que se ha disparado, el de los combustibles, con la bonificación del precio del gasoil y la gasolina, que está permitiendo que las empresas continúen con su actividad y los trabajadores sigan pudiendo llenar el depósito. De hecho, hay empresas de transportes en nuestra provincia que han recibido ya del Gobierno de España hasta 400.000 euros en bonificaciones, lo que da una idea del esfuerzo que se está realizando para que el sector se vea lo menos perjudicado posible por el conflicto bélico ocasionado por Putin.
La política real es esto: trabajar para resolver los problemas de la gente. Frente a aquellos que, en Andalucía, se han pasado cuatro años, incluidos los de la pandemia, sin actuar, tenemos un gobierno en España que se remangó la camisa el mismo día en que tomó posesión y no ha dejado de trabajar ni un solo día para mejorar la vida de la gente.
Ante un escenario económico adverso a nivel mundial, la prioridad para el Gobierno de España está siendo proteger a las familias. Ya se hizo así durante la pandemia, con los ERTES y las ayudas a los autónomos y las empresas habilitados por el Gobierno, que permitieron mantener cientos de miles de puestos de trabajo y evitar, con ello, una crisis sin precedentes en materia de empleo. Ahora, con la crisis de Ucrania y sus efectos en la economía, los socialistas volvemos a dar la cara. No estaría de más que Feijóo y los suyos hicieran lo mismo, en lugar de estorbar, tal y como han hecho hasta ahora.