Durante los últimos días hemos tratado de arrojar luz sobre las mentiras que vierte el PP en torno a una supuesta falta de abastecimiento en el Levante almeriense. En un nuevo y claro ejemplo de responsabilidad, como oposición que somos en Andalucía, las y los socialistas debemos velar porque se lleve a cabo una gestión, al menos, trasparente, pero nos lo ponen muy difícil cuando, un día tras otro, los argumentos del PP rozan la falacia o son, directamente, falsos. Es el caso de lo que sucede con el agua en el Levante. Los motivos que da el Gobierno de Juanma Moreno para cortar el grifo a los habitantes y empresas de los municipios del Levante son insostenibles, porque hay agua suficiente, pero el PP no la pide.
La Junta del PP ha ocultado en todas las normas y planes de sequía que ha aprobado el Gobierno de Moreno Bonilla que desde 2014 el 95% del agua que suministra la empresa que gestiona la Diputación Provincial, Galasa, es desalada y procede de Carboneras, como tampoco hace referencia alguna en esos planes a que exista un problema con la potabilización del agua procedente de los trasvases, sencillamente porque desde 2014 el PP en Diputación tomó la decisión de dejar de potabilizar agua de trasvases y suministrar agua desalada. Por lo tanto, miente la Junta cuando dice que la riada de 2012 inutilizó la potabilizadora. Está parada, no rota. El engaño de la Junta consiste en señalar en los planes de sequía que ha aprobado que el abastecimiento depende de los trasvases, cuando no es verdad.
De todos modos, si el agua del Tajo-Segura no puede llegar al Levante porque no funciona la potabilizadora, ¿por qué pidió la consejera al Ministerio 14 hectómetros más del trasvase, tras las lluvias en abril? Se mire por donde se mire, mentiras en cascada del PP.
Otra es que el PP en la Junta no recoge en sus decretos ni siquiera la posibilidad del suministro de agua desde la desaladora de Águilas ni de disponer de los recursos acumulados procedentes del Tajo-Segura, que las órdenes del Ministerio sobre el trasvase señalan y que reconoce la propia consejera de Agricultura, la señora Crespo, en respuestas parlamentarias al Grupo Socialista. Almería tiene disponibles en Murcia 20 hectómetros cúbicos de agua durante estos últimos años. ¿No puede reclamarlos para evitar dejar sin agua al Levante almeriense? No hay voluntad, está claro.