Los socialistas ejidenses votaron en el Pleno celebrado ayer en contra de ampliar la deuda del Ayuntamiento, a propuesta del PP, porque supondría una nueva hipoteca para el municipio
El Grupo Socialista de El Ejido rechazó durante el Pleno de ayer ampliar la deuda del Ayuntamiento mediante un nuevo préstamo, lo que supondría hipotecar más de lo que ya están las arcas municipales.
Según explica el Portavoz Socialista, Tomás Elorrieta, “el Partido Popular vuelve a hacer movimientos más propios de un trilero de feria que de un gobierno serio al intentar engañar nuevamente a los vecinos con una supuesta mejora financiera, cuando en realidad intenta enmascarar la realidad de nuestras finanzas”.
Elorrieta señala que “nuestro grupo ha votado en contra de la solicitud de un nuevo crédito por parte del ayuntamiento por un importe de más de veintidós millones de euros, un préstamo que, según el PP, mejorará la situación de la deuda del Ayuntamiento abaratando sus costes y aplazando su pago a diez años, aunque lo cierto es que, como siempre, tras esas palabras se esconden unas cuantas falsedades y alguna duda”.
El Portavoz Socialista aclara que “la primera falsedad es que este préstamo no supone condicionantes al municipio, cuando la realidad es que supone aceptar nuevamente una disminución en los gastos corrientes y la obligación de mantener los impuestos en el máximo permitido, prohibiendo medidas que puedan favorecer a todos o determinados ciudadanos. Es, en definitiva, otra confirmación de que el Ayuntamiento está intervenido por el Ministerio de Hacienda”.
Elorrieta señala, asimismo que “otra falsedad es que con este crédito se limita el impacto del pago del préstamo por la deuda a proveedores, lo que es falso ya que, por un lado, la parte correspondiente a este año ya está incluida en el presupuesto, y por lo tanto no hace falta atrasarla diez años, y por otro lado, la de los próximos años la vamos a pagar igual. Así que no solo no ahorramos nada, sino que hay un sobrecoste por la financiación del capital a pagar en este año”.
Tomás Elorrieta añade que “se incluyen en las cantidades a pagar deudas obligadas por sentencias, y sin embargo, no se detallan cuáles son esas deudas ni se hacen los cálculos que permitan saber exactamente qué coste se ahorra en cada caso, sobre todo cuando hay cantidades que ya están contempladas en los presupuestos de este año y que con este préstamo se posponen a años venideros”.
En su opinión, “tampoco se explica qué coste ha tenido para el municipio reconocer esas deudas en su día en lugar de aplazarlas judicialmente hasta la fecha de hoy, ni se sabe cuántas sorpresas más de ese tipo están ahora mismo en los juzgados ni qué riesgo real suponen para las arcas del municipio”.
El Portavoz Socialista se pregunta “¿qué fin va a tener ese dinero que se iba a invertir en disminuir nuestra deuda y ahora quedará como superávit? El equipo de gobierno dice que se va a destinar a futuras y maravillosas inversiones. Pero lo curioso del caso es que ya teníamos un presupuesto para 2016 con un superávit de un millón de euros y el PP decía que no se podía gastar en inversiones. Algo no cuadra en todo esto”.
Elorrieta concluye que “la realidad es que la política del actual equipo de gobierno ha sido siempre la misma: bajo el principio teórico de racionalizar la deuda, pasar la pelota a años posteriores hipotecando el futuro a cambio de una imaginaria mejora actual. Nosotros hubiéramos estado encantados de apoyar una propuesta que supusiese obtener mejores condiciones para deudas que actualmente tienen un coste elevado, pero no estamos conformes con aprovechar para, camuflados bajo este mantel, posponer pagos que ya están previstos hipotecando así el futuro. Y tampoco estamos dispuestos a apoyar medidas que limiten las posibilidades de prestación de servicio a los vecinos de la forma en que lo hace este préstamo”.