La viceportavoz socialista, Carmen Núñez, reclama al equipo de gobierno “que liquide la empresa y asuma responsabilidades por su deuda de 10 millones”
La viceportavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Almería, Carmen Núñez, ha advertido de que el equipo de gobierno del PP ha caído en la venta generalizada de plazas de aparcamiento a particulares de la empresa municipal EMISA “para tapar que la ha llevado a la ruina” como demuestran los más de 10 millones de euros de deuda a largo plazo que mantiene. “Pretenden tapar el agujero sin fondo en el que han convertido EMISA vendiendo el patrimonio de todos los almerienses”, ha alertado la viceportavoz.
De esa manera, Núñez ha considerado que el Partido Popular ha convertido “en tónica general lo que era una solución puntual” para los problemas de determinados aparcamientos después de que en el pleno celebrado hoy se haya dado luz verde -con la abstención de los socialistas- a esta medida para las instalaciones ubicadas en Carretera de Ronda y de que, con anterioridad, se aprobara para los de Gloria Fuertes y Avenida Vilches.
Para el PSOE, llegados a este punto “lo que tendría que hacer el Partido Popular es liquidar la empresa municipal” para acabar realmente con el problema que ha generado y “asumir responsabilidades por sus decisiones erróneas y su nefasta política en el diseño de aparcamientos subterráneos en la ciudad”. Esa mala actuación se concreta, ha pormenorizado la viceportavoz del Grupo Socialista y miembro del Consejo de Administración de EMISA, “en aparcamientos por toda la ciudad medio vacíos, con concesiones fallidas en algunas casos y con un coste de construcción más caro que la media en España”.
En cuanto a la venta de aparcamientos a particulares, Núñez ha reconocido que “aunque es una fórmula más atractiva que la concesión para quienes quieren acceder a una plaza, supone una importante pérdida de patrimonio municipal” y, además, “puede ocasionar problemas en el futuro en tanto que comienzan a convivir intereses públicos en la superficie, que sigue siendo de titularidad municipal, con intereses privados en el subsuelo”.
Eso significa, ha explicado, “que si el Ayuntamiento quiere realizar alguna actuación en superficie puede encontrarse con problemas si los propietarios privados se consideran perjudicados”. “Nos tememos que el equipo de gobierno no ha estudiado lo suficiente las consecuencias a largo plazo de estas ventas”, ha concluido Núñez.