Ramírez recuerda que las empresas logran beneficios económicos “a costa de contratos precarios del personal o con el repago de servicios por los almerienses”
La concejala del PSOE en el Ayuntamiento de Almería, Amparo Ramírez, ha dado a conocer una iniciativa, en forma de moción, que su grupo defenderá en el próximo pleno con la intención de que la futura Biblioteca Central Municipal tenga una gestión pública frente al planteamiento adelantado por el alcalde de privatizar el servicio. Para el PSOE, “la cultura y la educación en una ciudad tienen que hacerse por y para los ciudadanos sin un interés privado” y, en el caso de la nueva biblioteca, tiene que primar “que, desde el interés general, se llegue al mayor número posible de almerienses y que este centro pueda servir de motor de desarrollo cultural para la ciudad”.
De esa manera, la edil ha puesto el acento en que la gestión pública de la biblioteca, tal y como se recoge en la moción, tiene que ir acompañada de un proceso de negociación con los sindicatos representados en el Ayuntamiento para que se tenga en cuenta a los empleados públicos en la nueva plantilla, y su derecho a promoción o a avanzar en su carrera profesional, además de actuar al mismo tiempo en promover una auténtica red de bibliotecas municipales en las que haya una adecuada dotación tanto de recursos como de material.
Para el PSOE, “en la cultura no podemos escatimar medios” y “no se puede pretender que el objetivo en la gestión de la futura Biblioteca Municipal sea obtener beneficios económicos”. Tras remarcar que, hasta el momento, las nuevas instalaciones han supuesto a los almerienses una inversión de cerca de 3 millones de euros, Ramírez ha explicado que “ya se ha demostrado que cuando se concesiona un servicio, los beneficios económicos que la empresa quiere obtener los logra, normalmente, a través del contrato en precario que mantiene con la plantilla o a través del repago de los servicios que se prestan”.
El primero de los apartados supone que “los costes de personal los reduce, dando lugar a que no se reconozcan derechos de los trabajadores como la conciliación familiar”. Mientras que la segunda manera de obtener ingresos económicos que hagan rentable la gestión se basan “en un repago de los servicios que se prestan” que podría pasar “por empezar a cobrar por todo: por el carné de socio de la biblioteca, por sacar libros en préstamo, etc”.
En el caso de la gestión de la Biblioteca Central, además, los socialistas han advertido de que una gestión por parte de una empresa, “más allá de que pueda suponer un sobrecoste a la ciudadanía, también podría colisionar y crear distorsiones en la coordinación con la red de bibliotecas municipales que existe en la actualidad ya que esta se gestiona desde el ámbito público”.
Miseria para lo público
La actual Red de Bibliotecas Municipales del Ayuntamiento de Almería, que arrancó en el barrio de La Chanca en 1995 gracias a un proyecto socialista en el gobierno municipal, está formada en estos momentos por esa sala y otras tres, ubicadas en Cabo de Gata, El Alquián y Los Ángeles. Según ha explicado Ramírez, se trata “de centros pequeños, austeros y con una escasez de medios que salta a la vista”, como ha demostrado con una fotografía tomada recientemente en la de La Chanca y en la que puede observarse que los libros se organizan en cajas por temas ante la falta de estanterías o que las cortinas son pliegos de papel anclados a los cristales para que no moleste la luz a los usuarios.
Pese a ello, ha proseguido la concejala, “son bibliotecas que realizan una ingente labor debido al esfuerzo y la profesionalidad de las bibliotecarias, que son empleadas públicas, a la hora de realizar su trabajo”. “Llevan a cabo una labor cultural importantísima, garantizando el acceso en igualdad de condiciones a la cultura y cubriendo las necesidades de los usuarios”, ha resaltado antes de considerar que, en ese contexto, resulta “indecente” que “el alcalde le vaya a dar a una empresa privada la llave de la nueva joya de la corona de las bibliotecas, que nos ha costado tanto dinero a todos los almerienses y está dotada de lo último, mientras que desde el Ayuntamiento nos vamos a encargar de gestionar la miseria”.
Necesidad de nuevas salas
Con esa premisa sobre la mesa, los socialistas han recordado la necesidad de que las actuales bibliotecas cuenten con unos medios adecuados y de que se abran nuevas salas, tal y como llevan reclamando al Partido Popular durante los 15 años que lleva gobernando en la capital, en barrios como el de El Zapillo, entre otros, en los que se concentra un elevado número de estudiantes.
Asimismo, una vez alcanzado el objetivo de contar con una demanda Biblioteca Central, completamente necesaria en una ciudad de cerca de 200.000 habitantes, que deberá de encargarse de planificar y optimizar los recursos de la red de bibliotecas municipales, lucharán “porque cuente con una gestión directa porque, además de los motivos expresados, esa es otra manera de reforzar la red de bibliotecas municipales y de dotarnos de una mayor calidad en los servicios”.
“Desde lo público se puede hacer una gestión eficiente y de mayor calidad, con unos trabajadores que tengan empleos más estables y que trabajen en mejores condiciones” frente a una política de privatización promovida por el Partido Popular en el Ayuntamiento “que está dejando mucho que desear, como demuestran numerosos ejemplos”, ha afirmado Amparo Ramírez.
De esa manera, y para concluir, ha apostado “por hacer de la cultura un auténtico motor para el desarrollo de la ciudad de Almería” para lo que, a su juicio, el equipo de gobierno del PP, con el alcalde a la cabeza, tiene que cambiar su planteamiento en este asunto pese “a que ya sepamos que la política pública de gestión no le hace ninguna gracia”.