Pérez Navas señala “el desequilibrio en la atención a los barrios” y que cada almeriense tendría que pagar 500 euros para saldar deuda
El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Almería, Juan Carlos Pérez Navas, ha anunciado el voto en contra de los presupuestos municipales para 2017 acordados por el Partido Popular y Ciudadanos tras haber estudiado los mismos y constatar que son “los de la ceguera ante el desempleo y las necesidades sociales”, además de perpetuar “el desequilibrio en la atención a los barrios” y de tratarse de “los del pago de deuda” que todavía asciende a 98,1 millones de euros.
Pérez Navas ha desgranado cada uno de los apartados que han hecho decantarse al Grupo Socialista por rechazar las cuentas, comenzando por la partida “irrisoria” de 100.000 euros consignada por el alcalde con fondos municipales para la creación de puestos de trabajo, que ha contrapuesto a los 4,2 millones destinados por la Junta de Andalucía al Ayuntamiento de la capital para programas de empleo. En ese sentido, ha censurado que el equipo de gobierno destine “el 0,05% de un presupuesto de 182 millones de euros” a uno de los principales problemas de la ciudad, que tiene a 20.648 de sus habitantes desempleados.
1,75 euros de cada 100 a gasto social
Tampoco atiende el Partido Popular las políticas sociales como correspondería a la situación actual, según se desprende del análisis en detalle de la dotación para el área de Familia e Igualdad de Oportunidades. “Solamente se destinan 1,75 euros propios del Ayuntamiento de cada 100 euros del presupuesto a gasto social”, ha lamentado el portavoz socialista. Esa cifra es la que resulta de eliminar el dinero que se destina al pago de las nóminas y las subvenciones que recibe de otras administraciones para fines sociales, 10,7 millones entre ambos conceptos, a los 13,8 con los que cuenta el área encargada de gestionar los asuntos sociales.
Además, en ese apartado ha evidenciado cómo se ha incrementado en un 551% el dinero que se gastará en el Homenaje a los Mayores, mientras que solamente se ha incrementado en 20.000 euros las ayudas de emergencia social, que siguen siendo insuficientes -60.000 euros- y que, encima, recibe su aumento de restar esa cantidad a otra partida para atención a familias con necesidad y menores a su cargo.
El Gordo y la pedrea en los barrios
Con respecto a los barrios, Pérez Navas ha lamentado que “no se atienda el desequilibrio progresivo de la ciudad, en la que muchos ciudadanos sienten cada vez más que viven en el extrarradio”. Así, mientras que al céntrico barrio de Oliveros “le ha tocado El Gordo, con 700.000 euros para mejoras, la mayoría de los más de 40 barrios que hay en Almería se tendrán que conformar con una pedrea en forma de pequeñas inversiones que no siguen un criterio para cohesionar Almería”.
En relación a los barrios, también ha remarcado que ha quedado claro “la pantomima” en la que ha convertido el PP el proceso de participación en los presupuestos al contemplar para 2017 menos dinero que el año pasado -450.000 euros frente a 510.000 euros- para inversiones decididas en las juntas de distritos, ahora bajo un epígrafe titulado como inversiones resultantes de procesos participativos, que se desconoce cómo se gestionará.
Deuda e IBI
Por otro lado, desde la bancada socialista han realizado una mención especial a la importante deuda que sigue manteniendo el Ayuntamiento, que aparece reflejada en 98,1 millones de euros en las cuentas que se aprobarán en pleno a finales de este mes y que para poder liquidar, según ha remarcado el portavoz de la formación, “cada habitante tendría que pagar más de 500 euros”.
La última de las cuestiones puestas sobre la mesa por el PSOE sobre el tema presupuestario tiene que ver “con la mentira sobre el IBI” del PP, puesto que queda constancia en las cuentas la contradicción de que, aunque se pretenda bajar mínimamente, resulta que en realidad se va a recaudar 1 millón más por el cobro de recibos por este concepto.
“Se contemplan ingresos por el IBI por 50,9 millones, en una recaudación que luego siempre es mayor”, ha precisado, como consecuencia “de la trampa” de haber estado presupuestando menos de lo que era real años atrás para ocultar la subida del IBI que se ha hecho por parte del PP y de haber cuadrado esa cantidad que faltaba con incrementos ficticios en la previsión de otros ingresos. Para 2017, ha finalizado, eso se traduce en un aumento de lo que se pretende ingresar por sanciones de tráfico o por la venta de patrimonio municipal, que no corresponden a previsiones reales.