OPINIÓN. La lluvia en el pelo
Se han cumplido 50 años del golpe fascista de Augusto Pinochet en Chile en los que la represión, la dictadura y los asesinatos se prolongaron durante 17 años; una historia negra que lejos de olvidarse vuelve a salir a la luz con un lamentable repunte de posicionamientos ultra que defienden y añoran esta etapa oscura del país latinoamericano. Y apena, también, ver las conexiones y la fraternidad que entre existen el líder de la extrema derecha española, Santiago Abascal, y su homólogo chileno, José Antonio Kast, quien reivindica la dictadura y a los exmilitares condenados por crímenes de lesa humanidad, para quienes pide, además, el indulto.