Los socialistas ejidenses consideran que Góngora y Rivera deben elegir entre los intereses de la empresa de la que son consejeros y el interés general del municipio
El PSOE de El Ejido ha presentado alegaciones a la subida de la tarifa del agua, una subida que los socialistas ejidenses consideran poco clara y justificada técnicamente con argumentos oscuros. Así lo han explicado esta mañana en rueda de prensa los concejales Juan José Callejón, Juan Godoy y María José Lezama y el asesor jurídico de la agrupación, Alonso Ponce.
Según ha manifestado Callejón, “nosotros entendemos que algunos de los conceptos en los que se basa el equipo de gobierno para justificar esta subida de la tarifa son discutibles y, en cualquier caso, poco claros. Parece más un incremento a medida del socio privado de la empresa, para que obtenga más beneficios de los que ya obtiene, que una medida tomada por el interés general de los vecinos del municipio, aunque desde el equipo de gobierno intenten que lo parezca”.
El concejal socialista ha añadido que “todo esto es, posiblemente, fruto de la prisa que tienen el alcalde y sus concejales para subir cuanto antes el recibo del agua. Nosotros ya hemos avisado en varias ocasiones, desde que Góngora llegó a un acuerdo para dividir la empresa de servicios municipales, que había pactos ocultos en ese acuerdo, pactos que no conocíamos. Y ahora, todo eso está saliendo a la luz en forma de subida exagerada de la tarifa del agua para beneficiar a la empresa, una empresa que no debemos olvidar que es la responsable de la ruina económica de nuestro pueblo, y que nosotros queremos que deje de encargarse del abastecimiento del agua de este municipio”.
Callejón ha argumentado que “nuestras alegaciones buscan, sobre todo, que la gestión del agua se realice desde el ámbito público y de forma transparente, no como se ha hecho hasta ahora. El Ejido tiene que tener agua de calidad y un buen servicio de abastecimiento y mantenimiento. El canon debe estar controlado y fiscalizado por el Ayuntamiento para evitar que ocurra lo que ha ocurrido hasta ahora, que no es posible saber ni el dinero que se obtiene de la gestión del agua ni se sabe qué se hace con él”.
Juan Godoy, por su parte, ha recordado que “las obras de mantenimiento que la empresa estaba obligada a hacer porque así lo estipulaba su contrato no se han hecho, y ahora, se pretende justificar que esta subida tiene como fin que se realicen esas obras. Nosotros no estamos dispuestos a permitir que nuestros vecinos paguen por unas obras que ya tenían que estar hechas. Somos conscientes de que hay que hacer inversiones, pero se deben hacer con transparencia, y no debemos consentir que una empresa que no cumple, además, obligue al equipo de gobierno a adoptar medidas que sangran a los vecinos para que aumenten sus beneficios”.
A su juicio, “Góngora y Rivera tienen que decidir de parte de quién están, de la empresa o de los ciudadanos de este municipio, y antes de cobrar nada a los vecinos, asumir sus compromisos y obligar a la empresa a asumir los suyos, como esas obras de mantenimiento, que tenían que haber estado hechas hace muchos años”.
En cuanto a Alonso Ponce, ha destacado que “la subida de la tarifa del agua roza la ilegalidad y va en contra de lo que recomienda la directiva europea en esta materia, que es que haya un tramo del recibo que favorezca a las clases sociales más desfavorecidas y a los consumidores responsables, y a su vez, que se establezca como exento el primer tramo en cuanto al canon se refiere. Y lo que no recomienda es precisamente lo contrario, cargar todo el peso de la tasa por este concepto sobre las familias medias y los abonados más desfavorecidos”.
Ponce ha concluido que “es injusto que las promotoras inmobiliarias, los bancos o los grandes consumidores no participen en sufragar las infraestructuras que antes o después van a disfrutar, y que sin embargo, la mayor subida la sufran los abonados medios, que deberían ser los premiados y no los castigados”.