Los socialistas ejidenses estiman que la modificación de esta normativa propuesta por el equipo de gobierno se excede en algunos aspectos y se queda corta en otros
El PSOE de El Ejido rechazó en el Pleno celebrado ayer el proyecto de modificación de la Ordenanza Municipal Reguladora de la Tenencia de Animales por considerar que en algunos aspectos se excede y en otros se queda corta.
Así lo defendió en el transcurso de la sesión plenaria la concejala socialista María José Lezama, quien asegura que, “en cuanto a la regulación de la obtención de muestras de ADN de las mascotas, nosotros consideramos que quien no identifica al animal con el microchip, ni recoge las heces de la vía pública, ni vacuna a su mascota, no va a hacer el registro de ADN. Si no cumple la normativa actual, tampoco va a cumplir la nueva”.
A su juicio, “con esta medida, el equipo de gobierno pretende disuadir el cumplimiento de la normativa recurriendo al miedo a la sanción. Nosotros entendemos que es un problema de educación y de concienciación, y con estas acciones solo se va a conseguir castigar a quienes cumplen las normas”.
Lezama argumenta que, “en este caso, también nos encontramos ante el problema que más le reprochamos al equipo de gobierno los grupos de la oposición, la falta de limpieza. En teoría, se gastan 148.600 euros anuales en limpiar las heces de los animales de la vía pública, pero yo no veo que se limpien, porque por las calles por las que yo paso, cuando hay heces, o se acaban desintegrando con el tiempo o son arrastradas por la lluvia, y eso que llueve poco. No sé en qué se gasta ese dinero, pero excusar el elevado gasto que nos va a suponer el análisis de las heces en el ahorro en gasto de limpieza es difícilmente creíble”.
La concejala socialista añade que, “en lo que se refiere a la regulación de la estrategia de captura, esterilización y suelta, o método CES, es cierto que no hay normativa autonómica o estatal que lo ampare, pero tampoco la hay para la implantación del registro de ADN, por lo que es evidente que para lo que el equipo de gobierno cree conveniente sí hay regulación. A nuestro entender, en este caso, por el bienestar animal y por las implicaciones para la salud pública que puede conllevar, sería conveniente su regulación en la ordenanza”.