El Grupo Socialista impulsa la participación de las personas con necesidades de apoyo en la toma de decisiones comunitarias  

Inés Plaza, diputada nacional del PSOE de Almería
Inés Plaza, diputada nacional del PSOE de Almería

La Comisión de Derechos Sociales y Consumo, ha dado hoy luz verde a dos proposiciones no de ley socialistas; una para mejorar la participación de las personas que necesitan apoyo y cuidados, y otra, para implantar el índice de reparabilidad en aparatos eléctricos y electrónicos.

La portavoz de Derechos Sociales y diputada por Almería, Inés Plaza, ponente de la iniciativa sobre cuidados, ha subrayado que dicho texto apuesta por “fomentar la participación de las personas con necesidades de apoyo en sus comunidades para incluirlas en la toma de decisiones comunitarias”. Todo, dentro de la Estrategia Estatal aprobada por el Gobierno para un nuevo modelo de cuidados en la comunidad 2024-2030.

Asimismo, la portavoz ha resaltado que esta proposición no de ley se dirige fundamentalmente a personas con discapacidad, a personas mayores en situación de dependencia, a niños, a niñas, a adolescentes en el sistema de protección y a las personas sin hogar. “Se parte de que las personas que necesitan apoyos deben pasar de ser agentes pasivos y receptores, a ser consideradas como personas ciudadanas de pleno derecho, poniendo en el centro su voluntad y preferencias en las decisiones sobre su proyecto de vida”; ha explicado.

La iniciativa aborda también la necesidad de fomentar la concienciación social y de facilitar el acceso de estas personas a oportunidades económicas y participativas en los entornos donde vivan y en los diferentes movimientos asociativos, entre otros aspectos.

INDÍCE DE REPARABILIDAD

Por su parte, la portavoz de Consumo y diputada por Cantabria, Noelia Cobo, que ha defendido la iniciativa relativa a la reparabilidad en aparatos eléctricos y electrónicos, ha incidido en que una de las principales prioridades del Grupo Socialista es “fomentar la toma de decisiones informada por parte de la sociedad para decidir qué producto es el que seleccionar”.

Por ello, en línea con el trabajo del Gobierno y previa valoración de su impacto en el mercado interior, la iniciativa apuesta por implantar el índice de reparabilidad en aparatos eléctricos y electrónicos mediante un etiquetado frontal que muestre de manera sencilla y visual en qué grado es posible o no la reparación del mismo, permitiendo a las personas consumidoras contar con esta información a la hora de contrastar diferentes opciones de compra y su grado de dificultad, tanto  para conseguir las piezas de los electrodomésticos como para evaluar la carestía de la reparación. “Un índice que la nueva Ley de Consumo Sostenible obligará a incluir a los fabricantes”, ha concluido.