Duarte Antonio Rocha
Secretario de Bienestar Social y Capacidades Diferentes
El Ingreso Mínimo Vital (IMV) es una prestación dirigida a prevenir el riesgo de pobreza y exclusión social de las personas que viven solas o están integradas en una unidad de convivencia y carecen de recursos económicos básicos para cubrir sus necesidades básicas.
El 20 de julio de 2015, Pedro Sánchez se comprometió a poner en marcha, cuando fuera presidente del Gobierno y así ha sido, el IMV. Esta prestación es un paso más en la consolidación del Estado del Bienestar y una política de inclusión social que combate la desigualdad y la pobreza.
Además, es la culminación de un derecho que veníamos reclamando hace ya 8 años y hoy se ha convertido en todo un avance progresista con un sello indudable, el del PSOE.
Desde su implantación, hace un año y medio, los resultados son muy destacados. Hay más de 820.000 personas beneficiarias, de las cuales 300.000 son menores, lo que demuestra la importancia que está teniendo a la hora de reducir la pobreza infantil y mejorar la situación de los niños y niñas en hogares vulnerables ya que favorece especialmente a las familias con menores y el 66% de los titulares del ingreso son mujeres, que suelen ser la mayoría de las familias monoparentales.
El IMV garantiza un nivel mínimo de renta a quienes se encuentren en situación de vulnerabilidad económica. Persigue garantizar una mejora real de oportunidades de inclusión social y laboral de las personas beneficiarias. El IMV no es un servicio social, sino una renta que sirve para combatir la pobreza. La derecha y la ultraderecha quieren hacer parecer que es una ‘paguita‘ como ellos llaman, y no, no lo es, es una política de inclusión socialista que parte de la cobertura de las necesidades básicas para focalizarla hacia los procesos de inclusión e inserción laboral.
Lo que se cobra se calcula como la diferencia entre los ingresos mensuales que ya tiene la persona (o unidad de convivencia) y la renta garantizada en cada caso. Por ejemplo, una familia de padre, madre y dos hijos, que tiene derecho a 892 euros al mes de renta mínima. Si uno de los padres está cobrando un subsidio de 451 euros, recibirá de IMV lo que le falta para llegar a los 892 euros, es decir, 441 euros al mes. El abono de la ayuda se hará mensual, en 12 pagas, sin pagas extra.
Los socialistas creemos que las políticas sociales son nuestra principal herramienta de trabajo y sello de identidad para mejorar la vida de las personas y avanzar en el bienestar como se ha demostrado en todos estos años de trabajo porque somos la garantía de que nadie se quedará atrás.