Francisca Fernández Ortega. Portavoz del Grupo Municipal Socialista en Huércal-Overa
Que el futuro de Huércal-Overa no haya merecido ni siquiera debate, dice mucho, y nada positivo, de su actual equipo de gobierno. Rechazar todas las enmiendas de tu adversario político al proyecto de Presupuesto Municipal tan solo por el hecho de haber sido propuestas por aquél, delata, en mi humilde opinión, una prepotencia que debería ser incompatible con el ejercicio leal de la tarea de servicio público dentro de un sistema democrático, que habría de enriquecerse con las aportaciones constructivas de todos los miembros de la corporación municipal en tanto que representan todos y cada uno de ellos a una parte importante de la ciudadanía. Esgrimir que se dispone de la mayoría absoluta para decidir, en solitario y sin diálogo propiciador de consensos, los designios de nuestro municipio como único argumento para no entrar ni siquiera a valorar lo positivo que aportan las propuestas concretas y justificadas de modificaciones o inclusión de partidas presupuestarias específicas, es un argumento tan pobre como egoísta, ya que se están dejando de lado actuaciones que redundarían en beneficio de todos nuestros vecinos, no sólo a corto plazo, y en un contexto marcado por una grave crisis sanitaria, económica y social, sino pensando también a medio y largo plazo. La cuestión clave es por qué modelo apostamos para que nuestros vecinos puedan tener una vida digna y con calidad sin tener que salir fuera del municipio a buscarse el sustento, máxime cuando tenemos recursos sin explotar que sí han propiciado que otros municipios de la provincia hayan despegado.
El debate constructivo con la aportación de todos los que trabajamos por el interés general y el bien común, buscando las mejores soluciones de presente y de futuro para los problemas y los retos a los que nos enfrentamos, es lo que dota de sentido a la política. No será el Grupo Socialista quien se doblegue a estos actos de soberbia ni quien ceje en el empeño de defender lo que considera más beneficioso para Huércal-Overa. En ese sentido se orientan las enmiendas presentadas por nuestro grupo a las cuentas públicas para 2021. Dos grandes ejes conforman esta alternativa, en el marco del modelo de desarrollo con el que concurrimos a las elecciones y que apenas nos ha dado tiempo a comenzar a materializar durante el año en el que hemos ejercido la responsabilidad de gobierno, entre otras cuestiones porque no fue posible contar con la colaboración leal de uno de los socios de gobierno y luego firmante de la moción de censura justo cuando se iba a presentar el proyecto de Presupuestos 2020. Los dos ejes en torno a los que giran las 11 mociones presentadas por nuestro grupo municipal a los nuevos presupuestos se encuentran en las antípodas de las prioridades del alcalde Domingo Fernández, tanto las actuales, condicionadas por los acuerdos no declarados del pacto de gobierno PP-José López, como durante los ocho años de su anterior mandato como regidor municipal, caracterizados por la ausencia de un modelo de municipio que contemplase una apuesta por un modelo productivo de futuro, capaz de atraer empresas que ofrezcan oportunidades laborales a nuestros vecinos. Ya lo dejó claro el alcalde en su intervención en el Pleno donde se debatía el proyecto de Presupuestos 2020, cuando rechazaba nuestra propuesta, ahora de nuevo presentada como enmienda, de incluir una partida para sacar una convocatoria específica de subvenciones destinada a proyectos de emprendimiento rural sostenible; y lo hacía argumentando que no se debía condicionar el destino de las subvenciones para emprendedores, respuesta coherente cuando no se tiene claro qué hacer desde lo municipal para aprovechar al máximo nuestras potencialidades. Claro que estamos de acuerdo en la convocatoria general para apoyar a emprendedores en las diferentes líneas de negocio, y prueba de ello fue que aprobamos y publicamos una convocatoria general dentro del Plan Recupera puesto en marcha en nuestra etapa de gobierno y en base a la cual se han concedido las ayudas para apoyar a empresas y comercios del
municipio en una de las peores crisis a las que se han tenido que enfrentar. Pero hay que dar un paso más para crear empleo en nuestro municipio y eso debe reflejarse en los presupuestos.
Frente a la venta innecesaria de solares e inmuebles municipales en plena época de grave crisis y precios bajos, a la compra de solares y a las subvenciones como claves del proyecto de presupuestos presentado por Domingo Fernández, los socialistas apostamos por el desarrollo de áreas industriales y un Plan de Desarrollo Rural Sostenible capaz de impulsar la modernización de nuestro campo para que sea uno de los principales motores económicos y de creación de empleo del municipio, tanto directamente como a través de los sectores de los que empujaría (industria agroalimentaria, logística y transporte, energías renovables, nuevas tecnologías…). Industria y agricultura como claros referentes de futuro para nuestro municipio, con el asesoramiento experto de nuestra principal institución pública en materia de investigación, innovación y desarrollo: la Universidad de Almería, por mucho que el equipo de gobierno del PP, apoyado por el concejal tránsfuga, ni se molesten en escuchar.
Las enmiendas que presentamos permiten abordar con el necesario apoyo presupuestario actuaciones orientadas a fomentar la creación de empleo estable y de calidad, a potenciar la cohesión social y a cuidar el medio ambiente como factor de salud y de creación de riqueza; aspectos que, a juzgar por el menosprecio del equipo de gobierno, deben resultar nimiedades frente a la compra de solares millonarios a las que se dedica con especial atención.
Se incluyen en esta línea enmiendas para dotar de presupuesto a la ya mencionada convocatoria de ayudas para emprendimiento rural y para formalizar la colaboración que se venía desarrollando con la Universidad de Almería para que asesore, desde su departamento de Ingeniería Agrónoma, el diseño y puesta en marcha del Plan de Desarrollo Rural Sostenible del que también forman parte otras actuaciones que ya iniciamos (Innovación 20 y 21 del PGOU, la primera Ordenanza del Medio Rural que dejamos elaborada y pendiente de aprobar en Pleno, solicitud formal a la Consejería de Educación de ampliación de la oferta pública de Ciclos Formativos de FP … ). En el ámbito social se ha presentado una enmienda para la puesta en marcha de talleres socioculturales y educativos en barrios o pedanías para favorecer la cohesión social, y para prevenir el fracaso y el abandono escolar temprano. También se incluyen enmiendas relacionadas con la conservación del entorno y el cuidado del medio ambiente, línea estratégica para el grupo socialista.
Nada de esto le ha parecido al Partido Popular importante como para dedicarle algo de tiempo. Quizás se deba a que está muy ocupado, por ejemplo, promocionando como la medida definitiva para la reactivación del centro histórico la compra de dos inmuebles, cuyo valor de tasación sigue siendo un misterio incluso después de haber sido aprobado provisionalmente el Presupuesto que incluye su adquisición, y no por falta de haberlo solicitado reiteradamente por nuestra parte.
En suma, el Grupo Municipal Socialista no solo cree en el futuro de Huércal-Overa sino que seguirá trabajando por él. No hay arrogancia que pueda con las firmes convicciones. Aprovechando nuestra estratégicamente privilegiada situación geográfica, los socialistas creemos que el modelo de crecimiento del municipio debe estar basado en el desarrollo de áreas industriales que resulten atractivas a las empresas para instalarse, generando puestos de trabajo y aportando ingresos a las arcas municipales para seguir invirtiendo en nuestro futuro. Y también creemos en un Plan de Desarrollo Rural Sostenible que impulse la definitiva modernización de nuestro campo y permita explotar todo su potencial, lo que generará empleo estable y de calidad, del mismo modo que apostamos por abordar con rigor, seriedad y altura de miras la imprescindible tarea de conservación, puesta en valor y difusión de nuestro rico patrimonio natural, histórico y cultural, nuestras auténticas señas de identidad.