Andalucía ha sido la primera comunidad y es la única en toda España en contar con fondos incondicionados garantizados por ley, y con dotación presupuestaria, para los ayuntamientos.
A pesar de la crisis que aún estamos superando y habiendo estado Andalucía infrafinanciada por parte del Gobierno central en los siete años de Rajoy, nuestra Comunidad es la que más financiación incondicionada destina a los ayuntamientos.
En el Presupuesto para 2018, la Junta de Andalucía dedica 1.138,8 millones de euros a las corporaciones locales, lo que representa un crecimiento del 7,8% respecto al ejercicio anterior. Se mantiene la dotación de la PATRICA (la Participación en los Tributos del Estado) con 480 millones de euros de financiación incondicionada a los ayuntamientos, una cantidad que ha permanecido inalterable a pesar de las exigencias de consolidación fiscal que fueron impuestas por el Gobierno central y que nuestra presidenta, Susana Díaz, está resolviendo con el nuevo Gobierno Socialista de España.
La apuesta de la Junta de Andalucía por el municipalismo se refleja en el incremento del 14,3% que ha experimentado el Plan de Cooperación Municipal, hasta alcanzar los 658,8 millones de euros. A pesar de la crisis, desde 2008 a 2018 la financiación incondicionada que han recibido los ayuntamientos ha aumentado en Andalucía un 277%, pasando de 127,2 millones a 480 millones de euros.
Tenemos que revertir la desprotección de los ayuntamientos que impuso el Partido Popular en sus años de gobierno, con una reforma local que dinamitó las competencias municipales y con su falta de interés en aprobar una buena ley de financiación local.
Frente a ello, Andalucía viene destinando más del 1,6% de su presupuesto a la financiación incondicionada a los ayuntamientos, lo que nos ha convertido en un referente. Fuimos una comunidad pionera en 2010 al aprobar la Ley de Participación de los ayuntamientos en los tributos de la Comunidad Autónoma y a día de hoy seguimos siendo la única comunidad que garantiza a los ayuntamientos una participación en los ingresos autonómicos como fuente de financiación directa no condicionada, lo que permite a las corporaciones locales establecer sus propias prioridades de gasto en el ejercicio de su autonomía municipal. La apuesta por el municipalismo del Gobierno de Susana Díaz es, por lo tanto, indiscutible.