El Gobierno de Pedro Sánchez sigue situándose al lado de las personas y lo hace hasta el último momento para proteger lo que más importa. De ahí la reciente prórroga de las medidas de respuesta a las consecuencias de la guerra y otras iniciativas de apoyo a la mayoría social de nuestro país aprobada por el Consejo de Ministros; todo para seguir blindando los derechos de las clases medias y trabajadoras de nuestro país y seguir haciendo la mejor España.
Las iniciativas que ha vuelto a poner el Ejecutivo progresista sobre la mesa inciden en la protección de los sectores más vulnerables con el mantenimiento de la prohibición de ejecutar lanzamientos y del despido en empresas que reciban ayudas públicas, así como la bonificación del transporte público al tiempo que se mantiene también la eliminación del IVA en productos básicos, como el pan, y la rebaja al 5% del tipo correspondiente a granos y pastas.
El Gobierno de Pedro Sánchez está comprometido con mejorar la situación económica de la ciudadanía y reducir las consecuencias en sus vidas de la guerra en Ucrania y, sólo en 2023, el impacto de las medidas para contrarrestar las consecuencias de la guerra alcanzan los 18.000 millones de euros.
El Real Decreto Ley aprovecha, también, para subsanar cuestiones urgentes pendientes de tramitación como el derecho al olvido oncológico, avales para la compra de primera vivienda o una deducción de hasta 20.000 euros para vehículos eléctricos. Todas estas medidas se enmarcan en un contexto en el que la española es la economía europea que más crece –el cuádruple que la media europea- y ese crecimiento repercute, directamente, en mejorar la vida de las personas.
Este esperanzador panorama vuelve a caer como un jarro de agua fría en el sector catastrofista de este país que representa el Partido Popular que vaticinó una serie de males que no se están produciendo, ni de lejos, en nuestra sociedad ni en nuestra economía. En sólo 3 años se ha recuperado el PIB prepandemia mientras que de la anterior crisis de 2008, la que mal gestionó el PP, tardamos en recuperarnos 12 años. Con estos datos y estas realidades no es de extrañar que Núñez Feijóo prefiera esconderse, no debatir y lanzar sus bulos en actos de partido en lugar de enfrentarse cara a cara con la realidad y con el protagonistas de que a España le siga yendo bien, con Pedro Sánchez.