OPINIÓN. Moreno Bonilla, a por uvas

Juan Carlos Pérez Navas
Juan Carlos Pérez Navas

Entramos en el verano de lo que será, según las previsiones nacionales, el de la recuperación y del relanzamiento de la economía. En Andalucía esto es especialmente importante teniendo en cuenta el peso de nuestro sector turístico, pero lo afrontamos con incertidumbre debido a la acostumbrada falta de previsión y de planificación del Gobierno de Moreno Bonilla. Nuestra comunidad cuenta con tasa de incidencia más alta del país y, hasta la fecha, no hemos bajado de los mil contagios diarios lo que dificulta ofrecer una imagen de seguridad y de contención del virus que sí dan otras regiones que son nuestra sana competencia en materia turística.

La falta de actuación de Moreno Bonilla y su permanente obsesión por confrontar, en lugar de trabajar, con el Gobierno de España están frenando la recuperación que todos los sectores esperaban y en la que habían puesto sus esperanzas. Todo ello afecta a las expectativas de crecimiento de las plantillas de nuestro tejido empresarial de cara a esta temporada estival que ya ha dado comienzo.

La actitud del Gobierno andaluz está siendo la de restar importancia a la situación, la de ocultar datos sin que retrocedan los contagios y sin tomar medidas para garantizar el despegue económico y la seguridad sanitaria que la sociedad urge puesto que aún no hay citas presenciales, no hay refuerzos y algunos centros de salud siguen sin funcionar al 100% pese a las promesas de Moreno Bonilla hace más de un trimestre.

Andalucía ha sufrido durante toda la pandemia el lastre de un gobierno lento, falto de iniciativa y ocupado en el autobombo y, ahora, cuando más se necesita de su diligencia, las derechas se ocupan de buscar la confrontación dejando de ejecutar presupuestos, fondos o de acometer planes de empleo, sin olvidar quejarse de falta de financiación cuando tienen superávit en sus cuentas.

La pasada semana conocíamos un ejemplo más de cómo el Gobierno de Moreno Bonilla está huido de sus responsabilidades dejando de ejecutar planes de orientación e inserción juvenil en Andalucía en el marco del Plan de Choque por el Empleo Joven 2019-2021 y el Plan Reincorpora-T del Ejecutivo central por el que PP y Cs han dejado de contratar a casi 800 personas con alta cualificación para estudiar el mercado de trabajo. Es obvio que a Moreno Bonilla no le preocupa que el paro juvenil andaluz supere en un 12% al de la media nacional.