Juan Espadas y Juan Antonio Lorenzo en rueda de prensa
Notas de prensa

Juan Espadas propone un plan andaluz de prevención y actuación ante sequías e inundaciones para afrontar las emergencias de las crisis hídricas y el cambio climático

El secretario general del PSOE de Andalucía reivindica la “política útil” frente al “timo fiscal” de Moreno Bonilla que beneficia sólo “a los ricos” mientras resta más de 100 millones para mejorar los servicios públicos, y que demuestra que “no gobierna para la inmensa mayoría de andaluces sino para una minoría pudiente”

Juan Antonio Lorenzo, secretario general del PSOE de Almería
Opinión

OPINIÓN. Difícil de explicar

Cuesta trabajo entender que en unas circunstancias económicas tan extraordinariamente adversas, el Gobierno andaluz ande esquivando permanentemente su responsabilidad a la hora de arbitrar medidas que alivien la situación por la que están pasando la mayor parte de las familias de Andalucía y, muy especialmente, las de nuestra provincia. Y llama aún más la atención si el espejo donde Moreno Bonilla se puede mirar a diario es en el del Gobierno de España, que no ceja en su empeño de amortiguar los efectos de la guerra de Putin sobre los hogares españoles.

Juan Antonio Lorenzo, secretario general del PSOE de Almería
Opinión

OPINIÓN. Las cuentas del agua

Las lluvias de la pasada primavera dejaron unos imprevistos recursos hídricos en una provincia, como la nuestra, acostumbrada a ver pasar las nubes de largo en no pocas ocasiones. Aquellas precipitaciones colmataron fuentes, permitieron embalsar agua y aliviaron la situación de los acuíferos. En definitiva, fueron una auténtica tabla de salvación para Almería y, fundamentalmente, para nuestra agricultura, sobre todo si vemos lo que ha venido después: una pertinaz sequía y el aviso de restricciones en algunas provincias andaluzas. No ha sido el caso de nuestra tierra, afortunadamente.

Juan Antonio Lorenzo, secretario general del PSOE de Almería
Opinión

OPINIÓN. ¿De qué parte está el PP?

El Partido Popular se puede disfrazar tantas veces como quiera de partido con sentido de Estado que tantas otras demostrará que, efectivamente, no lo tiene. De otro modo, no se entiende que haya dado la espalda a la ciudadanía votando sistemáticamente en contra de leyes que apoyan a las clases media y trabajadora, a los estudiantes o las mujeres. Así ocurrió con Casado, -que no apoyó las medidas del Gobierno para hacer frente a la pandemia, se opuso a la reforma laboral, a la subida de las pensiones o al aumento del SMI- y así sigue ocurriendo con Feijóo, que ha votado en contra de las destinadas a atajar la crisis ocasionada por la guerra de Putin.